miércoles, 27 de marzo de 2019

¿Desde cuándo?

Que alguien me explique desde cuándo se ha puesto de moda eso de no tener sentimientos. Cuándo empezó a ser satisfactorio ser el que menos quiere en una relación o desde cuándo decir 'te quiero' es visto como signo de debilidad. Que alguien me explique por qué tenemos tanto miedo de sentir que simplemente fingimos que no lo hacemos, que nada nos afecta, que nada nos importa y que nuestro corazón es una armadura inquebrantable.

Somos humanos. Nos enfadamos. Reímos. Nos enamoramos. Sentimos dolor. Ira. 
Necesitamos reír al igual que a veces llorar. En otras ocasiones es necesario gritar, para soltar lastres, para olvidarse de todo, para sentirse mejor.

Lo que no es propio de nuestra especie es no sentir. No somos así, pero es en lo que nos queremos convertir para ahorrarnos sufrimientos.

Es curioso como incluso perdemos el interés de las personas cuando éstas lo tienen en nosotros. Cuando alguien de verdad muestra tener sentimientos por nosotros le llamamos "locx o pesadx". Estamos tan acostumbrados a que nos ignoren, a que muestren indiferencia por nuestros sentimientos que cuando alguien lo hace nos asusta y nos alejamos. Pero claro, luego vienen los dramas cuando alguien nos hace lo mismo a nosotros. 

Y es que cada día nos estamos volviendo un poco más raros, pero al final del día todos queremos alguien que nos diga lo mucho que nos quiere, aunque nos cueste admitirlo.

domingo, 17 de marzo de 2019

La confusión del querer

Si alguien me diese un euro cada vez que me han aconsejado algo totalmente contrario a lo que mi corazón quería en ese momento, ahora sería rica y estaría escribiendo esta entrada desde mi yate en las Bahamas.

Esto me ha hecho reflexionar sobre que lo que queremos no siempre es lo mejor para nosotros mismos. En los últimos años me he percatado de que en la mayoría de los casos somos capaces de aguantar lo inaguantable. Continuamos con relaciones que nos hieren día a día, que son tóxicas y que nos destrozan el corazón y en muchos casos, la mente. Somos inclusos conscientes del daño que nos provocan  determinadas situaciones pero aún así seguimos en ese bucle con dirección todo recto al desengaño. Quizá es por esta razón por la que me cuesta defender el amor, porque sé de sobra de qué trata ese abismo sin salida que significa el tener sentimientos. Las emociones nos atan, nos retuercen y nos hacen perder en muchos casos la poca coherencia que nos queda. Nos crean esa necesidad de saber, de conocer, de estar y de querer, que en algunos casos no es correspondida del todo.  Somos eternos amantes sufridores, podemos estar con un trozo de corazón en una mano y otro en otra y aún seguimos rogando a nuestro amor otra oportunidadNos gusta el romanticismo, la sensación de desazón y el desamor. Queremos entender lo que se le pasaba a Bécquer por la cabeza para escribir esas poesías. Pero en cuanto nos cansamos de esa sensación no sabemos salir de ahí, no controlamos ni nuestra propia mente, y mucho menos tenemos la fuerza de voluntad para desengancharnos de a quién hace que nuestras emociones estén más despiertas que nunca. Nos gustan las cosas difíciles y en cuanto algo es demasiado sencillo para nosotros huimos en la dirección contraria.

Quizá somos adictos al dolor, a sufrir y a dar todo por (y para) nada.

domingo, 29 de abril de 2018

Prólogo


Estoy en la universidad. (Sonido de aplausos, fuegos artificiales y cohetes)


 Llegada a este punto tengo que plantearme varias de las cuestiones que creemos sobre estas instituciones llamadas Universidades. Porque realmente hay muchos mitos. Muuuuuuuuuchos. Y además, también hay muchas cosas que no te esperas en absoluto.
Si por casualidad, eres pre-universitario y lees esto esperando fiestas, anécdotas locas o cosas por el estilo, dirige tu mouse hasta la derecha, donde hay una X y cliquea sin miedo joven post-púber , porque no vas a encontrar nada de eso.
Al revés. Esto que vas a leer, va a ser la realidad de la universidad, lo que no sabes, lo que nadie te cuenta. Pero, no nos asustemos, que no es para tanto. (O si...)

A mí, nunca me gustó estudiar, como al 90% de las personas adolescentes o niños, pero siempre ansiaba con un fervor inhumano llegar a mi mayoría de edad y poder entrar en la UNIVERSIDAD (dicho con voz de titulo de película americana).
Joder, es que ir a la universidad era casi como un sueño.
 Como buena niña, soñaba desde bien pequeña con pasearme – libros en mano con naturalidad-  por los pasillos de una gran escuela superior. Y es que, la universidad prometía y promete muchas cosas bastante tentadoras.

Y es que hay muchas ideas preconcebidas sobre lo que un joven se puede encontrar en la universidad. Algunos ejemplos:

Mamá siempre me decía que las amigas que encontrabas en la universidad eran las que duraban para toda la vida.
Otra cosa que madre me decía es que yo era muy inteligente y que seguro que lo tendría fácil donde eligiese.
Los profesores además, alentaban el deseo de ascender en la escala estudiantil diciéndonos que en la universidad estudias lo que TÚ eliges, es decir, nunca más varía las matemáticas o lo que es mejor, nunca más darías educación física a las ocho de la mañana con las legañas aún en los ojos.
Por otra parte, se prometía un horario mucho más flexible que el del instituto – unas 5 horas frente a las 8 que se da en el instituto-.
Además, las personas más mayores (hermanos, tíos, e incluso padres) , ya licenciadas o diplomados, parecían felices con su titulo y con las fiestas que se habían corrido.
Por otra parte, la beca ERASMUS era un aliciente más que importante por el que luchar para entrar en la universidad. (Ay, qué equivocada estaba).
Y la fuente de ideas erróneas más grande del siglo XXI sobre la universidad,  las famosas películas americanas sobre alumnos universitarios que van a fraternidades. ( Ejem, querido púber, en España no existen las fraternidades. El sistema de universidades americano es la antítesis del español y europeo)


Pero bueno, no voy adelantar nada (no qué va…) porque para eso existen las capítulos y todo esto iremos viéndolo por secciones.
  Y paciencia amigos, que la magia no se crea en un día.

jueves, 17 de julio de 2014

La oportunidad de la magia

Yo antes escribía, ¿sabéis? 
Escribía sobre amor, bueno, más bien sobre desamor o lo que yo creía que significaba. Aunque también escribía sobre otras cosas. A veces, me imaginaba historias paralelas, de personas desconocidas y escribía. O simplemente escribía una frase y ya, me quedaba tranquila pensando en mi futuro como escritora notable.

Pero esto de escribir es difícil.
Hay veces en las que tu inspiración se coge unas -larguísimas- vacaciones y tú no puedes ni rechistar.

 Hace años que mi magia me dejó, y digo magia, porque para mí, las palabras son magia.  
 Porque no hay nada más mágico que algo bien contado. Como una historia bien escrita.
 Pero, ¡No solo una historia! Un pensamiento, una opinión, un sentimiento puede llegar a ser magia.
¿Acaso no es magia el poder transmitir alguna emoción con una frase? , es decir, qué puede haber más mágico que una emoción provocada por un ser inerte y carente de vida como un libro. ¿Me explico correctamente? 

Considero - humildemente - que mi magia se fue porque se cansó de mí, de mis penas, de mis problemas - efímeros- , y de mis pensamientos adolescentes carentes de lógica alguna. Pero, aunque la magia no ha llegado a mis dedos hasta hoy (curiosamente), yo nunca dejé de escribir, nunca dejé de imaginar.
 En mi cabeza siempre escribo, además, escribo todo tipo de cosas, en prosa o verso, me da igual.
Escribo hasta que me quedo dormida, y antes de dormirme pienso muy fuerte para mis adentros: " Paula, todo lo que has escrito en las paredes de tu interior mañana lo materializas; esto es bueno, y no lo puedes perder". Por desgracia, lo pierdo; me duermo y ya. Lo olvido. Pero todos sabemos que lo que hay escrito en las paredes de un corazón realmente nunca se olvida.

En fin, lo que iba diciendo, que después de años de soledad, mi magia, mi inspiración, mi yo interior; ha decidido visitarme - oportunamente - una calurosa madrugada de verano. 
Una madrugada en la que posiblemente mis reflejos periodísticos estén totalmente mermados por el sueño y el calor abrumador.
Y por si fuera poco, después de tres años, escribiendo en mi cabeza, escribo por fin en algo físico.
No habría ningún problema si no fuera por que en mi cabeza queda todo considerablemente más poético, más hermoso y más para best-seller de lo que en realidad es.
No obstante, no me quejo.
Si después de estos años, escribo esta noche - entre sudores y bostezos- y no me sale cómo yo imaginaba (¡Pobre de mí, exigiéndome una novela digna de grandes escritores  a las tres de la madrugada!), no voy a dormir entre sollozos, ni dejar de escribir, ni abandonar otra vez a mi magia; porque la verdadera cuestión de estas líneas y la finalidad de este escupitajo de palabras, es hacer ver que la magia no la buscas y tampoco la encuentras.

 La magia te busca, te encuentra, te pega una patada en el culo, te saca de la cama a las dos de la madrugada y te hace escribir lo primero que a tú escasamente lúcida mente de universitaria se le ocurre.
Por esta razón, el titulo de “esto” iba a ser  <La magia de las palabras>, sin embargo;  tras escribir el texto completo, he pulsado la tecla de borrar con auto-exigencia. Seguidamente he puesto mi cara más inteligente, la cara más pensativa posible y he sacado otro título mejor –en  mi opinión- .


viernes, 22 de marzo de 2013


He dejado de creer en las coincidencias.
La vida te va poniendo pistas para que sepas que te conviene y que no.
Hay veces que, simplemente es mejor apartar la vista y no saber qué te quieren decir esas pistas. Hay veces en que simplemente tiras esas pistas al otro lado de la carretera con el fin de perderlas para siempre. Pero lo cierto es que acaban llegando a ti; la vida acaba llegando y el destino está escrito. Intentas luchar para conseguir que las cosas cambien, para que las cosas se transformen y por fin te pase lo que tú de verdad quieres. Y así te tiras media vida, esperando que ignorar todo eso sea lo correcto, pero no, se te va escapando de las manos, se va de tu control y no puedes hacer nada. 

Cuando la vida te está diciendo que vas a terminar perdiendo algo y no lo quieres ver, no sé si lo mejor es luchar o dejarte vencer.

sábado, 12 de enero de 2013

..Que ya poco me preocupa que la luna ande girando detrás de mí, o que el sol se esconda cuando yo quiero empezar a soñar.
  Ya no me preocupa porque sé que nada es capaz de hacerme daño.
Pocas cosas conseguimos sacar en claro en esta vida.

 Yo he logrado tener claro que la vida es efímera,poco nos llevamos al infinito y nos pasamos todo el tiempo intentar hacer duradero lo que es fácilmente perecedero,aunque entiendo que todo esto no es más que continuo movimiento ,¿sabes? Vaivenes de historias,idas y venidas de amores y pasiones desenfrenadas jamás olvidadas. Realmente creo que llegará el final de mi vida,y sin darme cuenta,no sabré nada,solo tendré preguntas,nada claro;tan solo los recuerdos y memorias. ¡Ojalá tenga en la memoria miles de historias! De esas que amargan los días y endulzan el alma. Amargan,si; porque jamás se te quitará la idea de que ese tiempo fue mejor. Endulzan, si; porque tienes la certeza de que esa historia es tuya y de nadie más. Que todo lo que tú has vivido nadie te lo quita.
Ten claro que es lo único que NADIE te podrá arrebatar. Por eso,intenta hacer que tus recuerdos se amarren bien a ti,de lo contrario; llegarás al final con las manos vacías..
Y ya sabes, si logras tener algo claro : dímelo.

lunes, 31 de diciembre de 2012

Pocas cosas conseguimos sacar en claro en esta vida. He logrado tener claro que la vida es efímera,poco nos llevamos al infinito y nos pasamos todo el tiempo intentar hacer duradero lo que es fácilmente perecedero,aunque entiendo que todo esto no es más que continuo movimiento ¿sabes? Vaivenes de historias,idas y venidas de amores y pasiones desenfrenadas jamás olvidadas. Realmente creo que llegará el final de mi vida,y sin darme cuenta,no sabre nada,solo tendré preguntas;nada claro,tan solo los recuerdos y memorias. ¡ojalá tenga en la memoria miles de historias! De esas que amargan los días y endulzan el alma. Amargan,si; porque jamás se te quitará la idea de que ese tiempo fue mejor. Endulzan, si; porque tienes la certeza de que esa historia es tuya y de nadie más. Que todo lo que tú has vivido nadie te lo quita. Ten claro que es lo único que NADIE te podrá arrebatar. Por eso,intenta hacer que tus recuerdos se amarren bien a ti,de lo contrario; llegarás al final con las manos vacías.. Y ya sabes, si logras tener algo claro : dímelo.

sábado, 8 de septiembre de 2012

2-.


Recuerdo momentos de algunas de mis relaciones pasadas, pero como ya he dicho, son recuerdos que carecen de valor para mí. Sin embargo, la relación más intensa que tuve fue con Irene, estuvimos cerca dos años.
Ella vivía en el centro de la ciudad, un piso precioso, decorado de forma muy moderna y minimalista. Recuerdo que tenía cuadros tipo lamina de fotografías colgados en las paredes y uno muy grande de Nueva York encima de su cama . Aunque lo más impresionante sin duda eran las vistas. Desde su ático se veía toda Madrid .La capital parecía infinita bajo su balcón.Veías a la gente pasear como diminutas hormigas, yendo cada una a un lado con prisa, ajenas a las demás personas. Comprendías cómo era la vida mirando desde aquel balcón. Seguramente podías pasarte horas mirando los alrededores ajeno al mundo.

Irene era una chica espectacular, para qué mentir. Estudiaba medicina. Tenía un futuro prometedor.
Su sonrisa podía llenar una habitación. Tenía el pelo  castaño, un castaño claro que le daba a sus bucles un toque de ingenuidad jamás visto. Los ojos castaños también eran grandes y alargados, y en sus curvas cualquier hombre hubiera deseado perecer.
Recuerdo que la conocí en un bar. Charlamos y pronto dijimos de volver a quedar, así poco a poco llegamos a conocernos. Era una mujer casi perfecta: guapa, agradable, me quería..
Solo había un problema, yo a ella no.
Con ella los días pasaban rápidos, estaba llena de vida y le quedaba muchísimo por vivir. Siempre me daba por pensar que su lugar no era conmigo. Una mujer tan llena de vida no podía estar con una persona tan aburrida como yo. Yo no alcazaba a llenar todos sus rincones ni agrupando todas mis fuerzas. Terminó dándose cuenta de que la relación no iba a ningún lado y que si siguiéramos podríamos condenar nuestras vidas a una relación mediocre sumida en la costumbre y el cariño, tanto ella como yo buscábamos amor y pasión. Amor del de verdad.

Tras Irene , entendí que lo que yo buscaba era la combinación perfecta. La combinación más difícil de encontrar . Con los años supe comprender que la vida no nos pone las cosas nada fáciles, y que lo que buscas no suele aparecer en tu puerta.

lunes, 3 de septiembre de 2012

1-.


Pasaron  los años .


Yo me encontraba buscando trabajo. Hacia un año que me había diplomado en empresariales y aún no encontraba trabajo en lo mío. Eran tiempos difíciles.
Tenía 23 años. Vivía en un pequeño piso no muy céntrico con lo necesario para vivir. Era un piso sencillo, tenía su dormitorio , cocina americana, salón y un pequeño cuarto de baño. Lo justo para vivir. Llevaba poco tiempo viviendo allí y se notaba porque las paredes estaban vacías y la casa aún no albergaba ningún recuerdo mío. Iba pagando las facturas y el alquiler con los ahorros de becas y trabajos eventuales de verano, además de alguna que otra ayuda paterna.
No se me hacía difícil pues todos los veranos cogía algún trabajo a sabiendas de que más tarde necesitaría dinero. Un verano estuve en un sitio de comida rápida en el que pagaban fatal, otro verano de dependiente en un súper mercado y así verano tras verano hasta que terminé la carrera.


En  ese momento mi vida estaba hueca. No tenía nada en lo que pensar, nada que ocupara mis días ni nada que me reconcomiera el alma, estaba vacío. Había pasado por varias relaciones, pero todas dejaban a su paso  ese vacío propio de aquellas relaciones que no marcan, que viven en el presente y no vuelven al futuro con recuerdos del pasado. Yo las llamaba relaciones a corto plazo, las llamaba así porque aunque duraran mucho ,cuando terminaban no quedaba ningún resquicio de ellas en mi cuerpo.
No obstante, aunque todas mis relaciones habían sido “a corto plazo” sabía que no toda mi vida iba a ser así. Que algún día encontraría a alguien que elevara mis días, que calentara mi corazón, que fuera mi vicio y que tras ella hubiera recuerdos con los que sonreír .O llorar.

jueves, 30 de agosto de 2012

Prólogo.


Tenía muy seguro todo lo que quería en la vida. Por desgracia, yo no.
Ella era quién andaba un paso por delante, se alejaba y me miraba desde allí . A menudo me preguntaba por qué la vida nos había juntado, por qué nos había elegido a nosotros. Probablemente éramos las personas más distintas de la tierra, podría nombrar mil antónimos para describirnos, pero con esta referencia es más que suficiente para comprender.
Aún así nos complementábamos. No sé, era cómo una especie de extraña atracción. Yo me quedaba atrás y ella me cogía, me sacaba adelante y me imponía su verdad.
Poco le importaba lo que pensaran los demás. Para ella la vida era  su mundo, y así, es como debe ser.
 Tenia como un eje magnético que me atraía hacia ella. Era imposible de descifrar qué era lo qué tenía. Cuanto más lejos quería estar más me acercaba. Era como una droga, una droga dura. Contra mas intentaba salir de ella ,más dentro estaba.

No sé si esto le ha ocurrido con todos los hombres con los que ha estado, imagino que sí. Ella tenía un don. Todo parecía estar hecho para ella.
Te contaba sus temores e inquietudes con una facilidad pasmosa, pero luego nadie sabía que había en el fondo. Tenía en el alma una caja de secretos que nada ni nadie se había atrevido a abrir jamás.
Sin embargo , ella te contaba todo lo que pasaba por su inquietante mente y aunque así fuera sabias que siempre guardaba algo bajo llave, siempre había algún misterio que tú no sabias. Supongo que eso era lo que le aportaba ese aura de misterio y tanto enganchaba.

 Cuando la conocí no sabía dónde me estaba metiendo. Ella era un mundo, un mundo aparte del nuestro propio. Quizá era la persona más compleja y especial que había conocido y por mucho que doliera siempre quería más.

>Ella siempre estuvo ahí, desde niños sabía quién era.
Alba tenía mi misma edad , y ya en el instituto su imagen no pasaba desapercibida.
No era que ella se hiciese notar, para nada. Tenía “algo”.
Los años de instituto pasaron fugazmente ajenos a lo que más tarde sucedería. Nunca crucé una  palabra con Alba, la escuché hablar un par de veces con sus amigas y supongo que ella también a mí.
Realmente, no hacía falta cruzar  ninguna palabra con ella para darse cuenta a simple vista como era Alba. Aunque su alma guardaba más secretos , era fuerte, segura de sí misma y hacía un extraño esfuerzo por no llamar la atención, pero sin duda, lo que más te sorprendía de ella era su naturalidad.

Esa naturalidad que tanto la describía fue creciendo con los años, haciendo de ella una mujer desenvuelta, sin miedo a nada y con mucho que decir.

viernes, 17 de agosto de 2012

(...)

Y sientes que se te van quebrando tus frágiles patitas de mariposa antes de llegar a volar , porque no tienes una ruta fija, porque aún no estás decidida a salir .
 Sientes tus ligeras alas moverse levemente con el viento y tu corazón se agita porque no sabes a dónde te va a llevar la corriente. Pero te vas. Te vas con todas tus ganas y todo tu ser.
Y sientes que estás justo donde deberías estar.

miércoles, 25 de julio de 2012

No puedes pretender conocer a un escritor por sus historias ,al igual que no puedes juzgar a un libro por su portada; para entender cada palabra hay que saber leer las almas y posiblemente eso,  sea una de las cosas mas difíciles de hacer.


Aunque los corazones griten en silencio es complicado escucharlos..
Mis ganas y mi poesía se quedan con su dueña.
   Se quedan conmigo.

martes, 10 de julio de 2012

Esto es siempre así, yo lo sé, ya me lo dice la razón y la experiencia. Cuando más alto estas es cuando más abajo caes y una vez allí sólo queda subir y así siempre, entrando en un bucle, en una espiral que nos rellena el tiempo, que se ceba con nuestras entrañas ,que alimenta nuestro insomnio y que nos gasta el alma. Es así, cuando estás tan alto sólo te queda caer, lo peor es que nunca hay nadie que te pueda coger .

miércoles, 4 de julio de 2012


Ya sabes, me gusta dar pasos para adelante aunque parezca que son para atrás. Voy aprendiendo de todo, voy cogiendo nota, enumerando recuerdos para poder corregir lo que hice mal. Para mi nunca hay nada en vano ,ni ningún tiempo es perdido. Me gusta pensar que algún día se darán cuenta de que todo lo hago por una razón que se desconoce. Me gusta creer que hay fuerzas que me atraen y me alejan de unos y otros al son ,sin ningún motivo. Le encuentro motivos y razones a todo para no quedarme atrás en el intento de reconocimiento. Creo en las almas y en sus cuerpos vacios y efímeros, creo en todo lo tangible y visible. Mi vida es mera casualidad, ya sabes, algún día me gustaría saber dónde voy a acabar.

jueves, 21 de junio de 2012

con x


No podía creer que estuvieran tan cerca, no se lo creía. Se enlazaban sus brazos, se entrecortaban las miradas, se exhibía la pasión, se entumecían los sexos, se palidecían los labios, se aceleraba a el corazón. Llegaban al punto álgido al son.Sin compañía,hacían un bis en las alturas, se reían de la ironía. Se querían comer el uno al otro , pero se querían. Abrazaban los tabúes , mandaban a la mierda a los prejuicios, sudaban las sabanas ,agitaban los sentimientos, tenían espasmos en el corazón.

Pues , después de todo,eran ellos. Era su momento y no le pertenecía a nadie más.

lunes, 18 de junio de 2012

3


Al final volví. Ya sé que me fui y que le dije que no iba a volver pero tiene un “ yo que se “ que siempre me hace volver a sus brazos. No sé si se habrá dado cuenta que para mí ya no es sólo un juego de sábanas y una almohada en la que dormir, no, es más que eso y precisamente ese es el problema.
Él es un tío, y yo ya sé qué pasa con los tíos ; un día te adoran y al siguiente ya están con otra, por eso yo no puedo estar cerca suya más tiempo o acabara haciéndome daño .
 No sé , tal vez me estoy volviendo loca, tal vez esto se esté alargando mucho y tal vez hasta él lo esté notando. Pero de verdad que lo estoy intentando, intento por todos los medios odiarle, tener razones para no huir con él cada vez que se me antoje. Pero no puedo .
Llegué a pensar que me diría algo cuando le dije que no volvería, aunque fuera un reproche o una crítica, algo que me hiciera quedarme, pero no lo hizo. Me ve irse y no le importa, su silencio me rompe aún más por dentro .
Ya todo me parece imposible, creo que un muro se ha levantado entre mi corazón y lo que sale por mi boca.

domingo, 17 de junio de 2012

2


Empezaba a notar la garganta seca. Era como la sentencia de algo irreal. Ella se iba alejando y, aunque lo había advertido desde lejos, nunca tuve la intención de continuar. Se iba, me dejaba, estaba yo solo. Estaba sin ella.
No recuerdo bien la sensación, quizá sea  porque no fue solo una sensación, sino miles. Se me entrecortaba el habla, sin embargo ella sabía perfectamente qué quería decir. Mis manos se veían incapaces, llenas de pinchazos y dolor, pero ella notaba cada caricia.
Me frustraba ver que se iría, pero seguía estático ,parado, inerte, como un ser sin vida, viéndola irse .
No sabía si la volvería a ver, ella me aseguró que esto era un Adiós pero yo nunca la creía, y aunque parecía convencida, me arriesgaba a creer que volvería a verla.


sábado, 16 de junio de 2012

Primera parte


Era como cortar el aire con un cuchillo de acero puro, ella lo sabía, su voz era tajante y sus manos cortantes. No quería que se diera cuenta de que  yo era como cualquier chico ( como cualquier chico que ella puede conseguir), no quería que se diera cuenta de que yo no tenía nada de especial, al contrario que ella.


Me azotaban las horas en la nuca, me despertaban, me espabilaban, porque cada segundo que pasaba era un segundo menos junto a ella. Yo lo sé, nunca he estado tan contagiado del aroma de los besos de nadie, pero ¿ sabes? Ella siempre tiende a romper mis esquemas.
Vive la vida como si fuera el guion de una película, es verdad, yo se que su vida es una película y yo soy un mero personaje más.
 Una vez vino a mi casa, traía el pelo recogido , me dijo que quería estar conmigo y nada más, había sido un día duro para ella y se notaba, quería des-estresarse bajo mis sábanas blancas. Está claro que no dudé ni un momento en hacerla mía. Porque era ella, tan indomable pero tan sumisa, tan fiera como niña. Era ella,  y lo que no sabía es que me tenía sólo para ella.